El presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, develó un par de cuadros conmemorativos en reconocimiento del trabajo de los secretarios de Educación Pública, Josefina Vázquez Mota y Alonso Lujambio Irazábal.
En el evento estuvo ausente la ex candidata presidencial, Vázquez Mota, y por parte del fallecido Alonso Lujambio, estuvo presente su viuda Teresa Toca.
En el salón Nishizawa, donde penden los cuadros de todos los titulares que han pasado por la titularidad de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Felipe Calderón, destacó el trabajo de ambos funcionarios.
“Decía José Vasconcelos que una verdadera educación no es completa si le falta el aliento que solo puede engendrar un gran propósito, un alto ideal, por lo cual celebró el honrar con la develación de estos cuadros a dos servidores públicos que “demostraron con hechos su compromiso con una educación pública de calidad”.
Tanto Vázquez Mota como Lujambio Irazábal, fueron “fieles sucesores de Vasconcelos, merecedores de este titulo. Y ellos como quería Vasconcelos trabajaron guiados por el alto propósito de conquistar y defender la libertad y desde luego de transformar al hombre y a la humanidad a través de la educación”, dijo Felipe Calderón.
Calderón, destacó que desde diciembre de 2006 hasta abril de 2009 Vázquez Mota ocupó la titularidad de la SEP, con lo cual “sentó las bases para la transformación educativa que ha vivido el país en los últimos años”.
Entre las cosas que ella realizó Vázquez Mota al frente de la SEP, fueron la Alianza por la Calidad de la Educación (ACE), que suscribió con el magisterio nacional (2008) y que implicó transformaciones radicales con el Sistema Educativo Nacional (SEN). Inició también el programa para rehabilitar y equipar la infraestructura educativa, instrumentó los programas de escuela segura y escuelas de tiempo completo, puntualizó Calderón.
Por su parte Lujambio Irazábal, fue secretario de Educación Pública, entre abril de 2009 y marzo de 2012, donde concretó muchos de los compromisos planteados en la ACE, estableció una reforma en el programa de carrera magisterial, mediante la cual el 50 por ciento del reconocimiento de los maestros está vinculado al aprendizaje que los alumnos obtengan, con ello “dio quizá el paso más importante para la calidad educativa, al vincular el reconocimiento económico del maestro con el resultado de su trabajo”, señaló Calderón.
Durante su gestión un impulso inédito a la participación social en educación, multiplicó las becas educativas y agilizó la conexión digital de los centros escolares y se crearon más centros de educación superior en el país que ningún otro para un periodo similar, dijo Calderón.
Los aportes de Vázquez Mota y Lujambio a la educación “son claves y tangibles, ambos dedicaron su energía a lograr que la educación se convirtiera tal como lo quería Torres Bodet en la oportunidad de formar mexicanos con trabajo, competencia técnica y espíritu de justicia para afianzar la independencia política y económica del país”, concluyó Calderón.
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