Finalmente ya se supo en qué nómina
se dio refugio al ex alcalde de Guaymas César Lizárraga. Ayer fue nombrado
Director de Proyectos del Instituto Sonorense de Infraestructura Educativa,
donde la principal firma es Luis Felipe Romero López, hermano de Roberto, el
polémico secretario de Gobierno.
Buen pudiéramos decir entonces que el
cobijo político y económico para Lizárraga, aunque anunciado desde hace tiempo,
se lo podemos ahora abonar a Roberto Romero, quien para lograrlo seguramente
hizo algún tipo de alianza con el titular de la SIDUR, José Inés
Palafox.
Imposible pasar por alto que para
sentar en esa posición al cuestionado ex alcalde guaymense, hubo que desplazar a
un ingeniero de apellido Bustamante de quien dicen era una recomendación de
Roberto Dagnino, así que el asunto da para más.
Ahora bien, no serán pocos los que
cuestionarán el por qué los ex alcaldes panistas al parecer tienen asegurada una
posición en el Gobierno del Estado, independientemente que sobre ellos pesen
señalamientos de graves irregularidades en el manejo de los dineros
públicos.
“Perro que come huevo, aunque le
quemen el hocico”, dice la conseja del refranero popular, por lo que se piensa
que ex alcaldes como Lizárraga, o el de Nogales, o el de Puerto Peñasco, o…
Podrían todos ellos trasladar sus malas artes al escenario estatal, además de su
mala imagen, claro.
Me parece que más que amor por los
desvalidos políticos que se quedan sin chamba, aunque con las carteras llenas,
hay un interés político superior en el hecho de darles cobijo.
Uno de los factores estratégicos que
llevaron a la gubernatura a Guillermo Padrés, es que supo atraer hacia su causa
a los grupos y personajes priistas que fueron dejados en el abandono político
por el ex gobernador Eduardo Bours.
Los votos que se puedan arrancar a
los adversarios son muy importantes, primero porque la fuerza que se les resta
su suma como un “punto doble”, además de que regularmente no se vienen solos
sino que cuando menos arrastran tras de sí los votos de la familia, amigos,
grupos afines y, en algunos casos, se trata de personajes que mantienen
liderazgo social a pesar de estar moralmente cuestionados.
Por eso pienso que el gobernador
Padrés trata de evitar que haya fugas de panistas hacia otros proyectos, aunque
pudiera pensarse que se trata de cartuchos muy quemados.
En fin, el caso es que todos los
“muchachos” ya tienen seguro su cheque y por tanto esta firme su “lealtad
partidista”, que parece es más importante que el peligro que puedan tenber los
tesoros a su cargo.
Bien por Fermín
Bien por la actitud del líder de la
Sección 28 del SNTE, el maestro Fermín Borbón, quien ante el enésimo anunció de
la probable construcción de un nuevo hospital del ISSSTE en Hermosillo, no se
quedó cómodamente sentado a esperar sino que solicitó a la delegación estatal
del Instituto que se ponga las pilas con las gestiones necesarias.
El maestro Fermín se reunió con el
delegado estatal del ISSSTE, Héctor Alejandro Preciado, para reiterar que es
urgente la construcción de un nuevo hospital para la atención de los
trabajadores federales, porque el único que se tiene en Hermosillo tiene 55 años
de existencia.
Recordó el Maestro que únicamente la
Sección 28 del SNTE tiene en el ISSSTE más de 100 mil afiliados que demandan
servicios médicos de calidad, por lo que no sólo es necesaria sino urgente la
construcción de ese nuevo nosocomio que ya se ha venido anunciando pero ha
quedado como promesa incumplida.
Para esta reunión, el secretario
general de la Sección 28 tuvo la compañía y apoyo de los diputados federales
Dora María Talamante Lemas (Panal) y Enrique Reina Lizárraga (PAN), además de
los dirigentes de la Federación Democrática de Sindicatos de Servidores Públicos
(FEDESSP) en Sonora, Rafael Coronado, J. Alfonso Urquídez Román y J. Carlos
Félix Ibarra.
La carta de Bulmaro
Y a propósito de los líderes
magisteriales, me llamó la atención la carta pública que el ex diputado y ex
muchas cosas más, Bulmaro Pacheco, le dirigió al actual diputado local Ismael
Valdez (Panal), quien por cierto fue secretario general de la Sección 28 del
SNTE.
En esa carta Bulmaro le reprocha a
don Ismael la alianza que su partido mantiene con el PAN Sonora. Unos párrafos
de la extensa carta lo dicen todo:
“Por eso nos llama la atención que en el desempeño actual de su cargo
como diputado local de representación proporcional, cuando todos apostábamos que
usted se iba a conducir apegado a los valores y principios que lo distinguieron
cuando fue regidor en el Ayuntamiento de Cajeme, o como dirigente estatal de la
sección 28 nos haya sorprendido con sus apoyos incondicionales a la bancada del
PAN, incluidos asuntos que a tirios y troyanos se les ha demostrado que no son
viables, porque no se apegan a la Constitución, las leyes y el sentido
común.”
“¿Cómo ser Ismael, solidarios y apoyar a una bancada donde
predomina el snobismo político,el futurismo y el soso altruismo light en materia
de apoyos sociales? ¿Cómo apoyar a una bancada que cada vez que escucha sobre
derechos sociales y conquistas sindicales -además de la molestia que les causa-
a sus integrantes les da urticaria? ¿Cómo apoyar a una bancada que no cuenta con
la mínima libertad para ser auténtica y está supeditada en todo al
Ejecutivo?¿Como apoyar a una bancada del PAN que acusa una profunda ignorancia
del derecho y que a menos de un mes de su entrada puso en crisis constitucional
al poder legislativo?
“No existe ninguna justificación ética, política o moral que
pueda alegarse a favor de una alianza que al SNTE nada bueno le ha
proporcionado, salvo la publicidad de logros que usted y yo sabemos, obedecen a
negociaciones de tipo nacional y no son exclusivas de Sonora.”
Pues allí está Bulmaro indignado con don Ismael, pero la verdad es
que me parece que le falta dirigir la mira más arriba, porque al final de las
cuentas sabe que el diputado no se manda sólo, como no se mandaba el propio
Bulmaro cuando fue diputado local, diputado federal y senador.
Sin embargo, esta “verdad” salida del ronco pecho de Bulmaro, puede
ser el sentimiento de muchos priistas más, dolidos porque antes contaban con el
apoyo del sindicato de maestros y ahora su corazón está teñido de azul… con
tinta lavable, claro, pero azul mientras dure.
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